Durante los últimos años, la Medicina Materno Fetal, ha tomado una gran importancia dentro de los servicios de Gineco – Obstetricia. Incluye al feto como paciente, lo que hace que el manejo de la paciente embarazada, se lo realice de manera integral.

Esta subespecialidad, permiten diagnosticar, prevenir y tratar embarazos de alto riesgo, así como también prevenir, detectar y corregir posibles afecciones del feto durante su vida intrauterina. De esta manera ayuda al curso adecuado del embarazo y el sano desarrollo del feto.

El especialista en Medicina Materno Fetal asegura un cuidado integral del embarazo, realizando un seguimiento sobre la condición de la paciente. Este seguimiento incluye la realización y supervisión de cualquier tratamiento o exámenes que se requieren tanto para la madre como para el bebé.

¿Cuándo recurrir a un especialista en Medicina Materno Fetal?

Un profesional en Medicina Materno Fetal, está altamente calificado en el cuidado y estudio del embarazo, es decir, que cualquier mujer embarazada, puede recurrir a esta especialidad y garantizar un seguimiento adecuado, con el que podremos identificar o descartar cualquier enfermedad que puedan poner en riesgo tanto la vida de la mamá como la vida del bebé.

Sin embargo una mujer con alto riesgo o que padece enfermedades crónicas, debe visitar al especialista antes de quedar embarazada o inmediatamente después de diagnosticar su embarazo en el primer trimestre de gestación.

Existen factores que aumentan la posibilidad de contemplar un alto riesgo obstétrico, los mismos que alertan al médico deben mantener un seguimiento más profundo como:

• Edad de la madre.
• Diabetes.
• Presión arterial alta.
• Hipotiroidismo
• Parto prematuro previo.
• Abortos a repetición.
• Embarazo gemelar (2) o más bebés.
• Diagnóstico previo de una malformación o problemas en el crecimiento del feto.
• Enfermedad crónica o si empieza a desarrollar complicaciones durante el embarazo.

Hablar de embarazos sin riesgo es hablar de un número de personas muy limitado, porque realmente las mujeres que mantienen un bajo riesgo en todas las enfermedades, no son la mayoría. Desafortunadamente, nosotros somos el resultado de nuestra historia personal y del momento físico que estamos experimentado. En este caso, el momento fisiológico del embarazo conlleva cambios muy drásticos en la madre, que dan como consecuencia un aumento en la probabilidad de: preeclampsia, parto prematuro, placenta previa, entre otras, que son complicaciones que se pueden presentar en cualquier mujer.

¿Qué estudios y exámenes se realizan en el seguimiento de este tipo de embarazos?

El punto de partida de esta especialidad es reconocer al embrión y el feto como paciente, para proporcionar atención médica especializada, haciendo uso de estudios avanzados y procedimientos específicos, que van desde ultrasonidos de III nivel 3D Y 4D, exámenes de screening del primer y segundo trimestre (exámenes de sangre + ecografía), exámenes de screening no invasivos (examen que valora el ADN fetal en sangre materna) o exámenes diagnósticos invasivos que permiten prevenir, diagnosticar e identificar anomalías fetales como: Trisomía 21 (Síndrome de Down), Trisomías 18 y 13.

¿Qué es el Screening Prenatal?

El Screening Prenatal del I trimestre se realiza a la embarazada para detectar posibles alteraciones genéticas del feto.  Es una prueba no invasiva, que se realiza a partir de una muestra de sangre de la sangre. Es un examen de rutina que no conlleva a ningún riesgo para la madre, ni para el feto. Incluye la realización de exámenes bioquímicos más un examen ecográfico, los mismos que se planifican entre la semana 11 a 14 de embarazo.

En conclusión, el especialista en Medicina Materno Fetal, es el especialista mejor entrenado para detectar y manejar cualquier complicación que se presente durante el embarazo.

Dr. Jaime Mosquera Vallejo